El maestro de cantería Lorenzo Fernández de Iglesias (Quintana-Monegro, 1655-1721) proyectó en 1703 la portada del Palacio Arzobispal, su principal trabajo, obra contratada en 1704, en cuyo primer cuerpo de la fachada se abre un «vano central de medio punto enmarcado por columnas pareadas que sostienen los extremos del frontón roto, y el segundo compuesto por balconada entre pilastras con rico repertorio ornamental» (Herrera García 1988). Será el antecedente inmediato de la portada del Colegio Seminario San Telmo, de Leonardo de Figueroa.
Fuente: Jándalos.Miguel Ángel Aramburu-Zabala Higuera y Consuelo Soldevilla Oria