A las 8 de la tarde, PROCESIÓN DE NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA desde San Francisco al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Alocución del Rvdo P. Pedro Miguel Sisniega y canto de la Salve.Recorrido:Cervantes, Jesús de Monasterio, San Luis, San Fernando y Avda. de Valdecilla. Ante el Hospital, canto de la Salve. Regreso por Avda. de Valdecilla, San Fernando, San Luis, Jesús de Monasterio y Cervantes a San Francisco.
Esta tarde a partir de las 8 de la tarde, la virgen de la Esperanza saldrá desde la Iglesia de San Francisco hacia el Hospital Marqués de Valdecilla, para hacer su visita a los enfermos. Esta talla de 1959, es obra del santanderino Manuel Cacicedo. La imagen costó 60.000 pesetas. Salió en procesión por primera vez en Jueves Santo de ese mismo año, en lugar del San Juan que había desfilado desde que se fundó la Real Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestra Señora de la Esperanza y San Juan Apóstol, en el año 1946. La imagen de la Virgen estrenó en 1972 su manto procesional, bordado por las Hermanas Clarisas en su monasterio de Castil de Lences, en Burgos. En 1994 estrena su segundo manto procesional por el gran deterioro del anterior y se aprovecha para reducir el manto de 28 a 24 metros, de mejor manejo.
HISTORIA DE LA PENITENCIAL:
La historia de esta penitencial, se remonta a marzo de 1946. Fue fundada por devotos de la advocación de San Juan venerada en la céntrica parroquia de San Francisco, (la cual es actualmente todavía su sede), la mayoría de ellos pertenecientes al gremio de agentes comerciales de la zona. (Cabe ahora destacar que la Semana Santa de Santander se caracteriza por una peculiar faceta; y es que en la mayoría de los casos, en la mayor parte de las 12 Hermandades penitenciales, fueron asociaciones de vecinos, asociaciones laborales e incluso gremios de diversos oficios los que fundaron casi todas las cofradías montañesas). Como ya hemos dicho, en este caso fue el gremio de agentes comerciales quien integró primitivamente la hermandad en 1946. Con respecto a este hecho mencionamos a continuación una curiosa anécdota que aconteció durante los años 40’, 50’ y principios de los 60’, que nos ha sido confirmada a través de fuentes cercanas a la organización del blog. Y es que según hemos podido confirmar, uno de los fundadores o primeros congregantes de la Hermandad, quien además era junto con su familia el encargado de manejar y supervisar el funcionamiento de la célebre grúa de piedra de la bahía santanderina, también agente comercial, tenía un hijo, (también cofrade), que asistía al ya desaparecido club Kostka de Santander, (un antiguo centro social juvenil de recreo y ocio propiedad de los PP. Jesuitas). Por este motivo, este primer congregante pudo así animar a todos los chavales de esa asociación durante los primeros años a sumarse a la recién creada Cofradía de la Esperanza, de la Iglesia de San Francisco. De esta manera, la Hermandad fue creciendo y haciéndose numerosa, hasta poder ostentar las responsabilidades y obligaciones que una Cofradía Penitencial debe cumplir, pudiendo así procesionar sus pasos, desfilar con hábito y nazarenos… Por dicho motivo la Hermandad fue también muy popular en esa primera etapa entre la juventud de Santander. Antes de obtener su actual titular en 1958, (La Stsma. Virgen de la Esperanza), los hermanos cofrades, (una vez aprobados los estatutos por el obispado), comenzaron a procesionar por las calles del barrio la antigua imagen de “San Juanín”, la magnífica talla de Lorenzo Coullaut Valera que fue realizada por el escultor hispalense en Sevilla, en 1920, para la antigua Cofradía de la Orden Tercera de San Francisco. Dicha talla, cuyo verdadero nombre es “San Juan”, procesionó desde esos primeros años hasta 1959, cuando al recibir su nueva titular, (La Virgen), la Hermandad se quedó sin nazarenos y le apartó de la Semana Santa hasta 1980, cuando volvió a ser procesionada a hombros como antaño. Tras estos primeros años de intensa actividad se encarga la talla de la Virgen de la Esperanza, (de vestir), a D. Manuel Cacicedo Canales, célebre imaginero y artista cántabro quien realizó muchos otros trabajos en el campo de la imaginería religiosa, dejando así su huella en la Semana Santa de Santander. La Stsma. Virgen María de la Esperanza, llegó a Santander en 1958, siendo procesionada sobre precioso trono de plata portado a ruedas, de Domingo Mucientes, en 1959. La hermandad, a partir de esos años, llegó a pagar un sueldo a los chavales que habituaban a portar la imagen bajo el paso, (de 5 o 6 ptas).
En 1969, se recuperó la antiquísima procesión de La Soledad, en Sábado Santo, con 400 años de historia, y desaparecida a principios del siglo XX, siendo atractiva para el público al ser una procesión caracterizada por la casi exclusiva participación de mujeres, y el comienzo de la procesión de madrugada, acabando esta en el propio templo eclesiástico, con el Sermón de la Soledad. En 1972, la hermandad adquirió el precioso y magnífico manto verde esperanza de 15 m2, con bordados decorativos en hilo de oro. Además del actual vestido blanco bordado, que aportaba a la imagen una sensación ineludible de realismo y naturalidad. La sencilla corona o aureola que se situaba sobre la cabeza de la efigie, fue siempre la misma desde la adquisición de la imagen. En el año 2006, la imagen de San Juan, que volvió a ser procesionada en 1980, se comenzó a portar a hombros por costaleros de la hermandad. A continuación, consideramos menester hablar a cerca del hábito y la vestimenta de la Hermandad. La ropa que sus congregantes portan, consta desde la fundación de la Cofradía de los mismos elementos. Al ser filial de La Cofradía de Los Dolores, (y como ya hemos señalado en otras reseñas), la Hermandad se caracterizaba por llevar: túnica, zapatos y cubrerrostro negros; y cíngulo y capa color verde esperanza; (pues todas las hermandades filiales de Los Dolores llevan túnica, zapatos y cubrerrostro negros, y la capa de un color diferente cada una). Esta última lleva bordado sobre un lateral el emblema heráldico de la Hermandad, que consta de corona un águila de San Juan explayada, con un corazón doloroso ardiente, rodeado por las palmas del martirio; todo ello rematado por corona real. Prácticamente, (exceptuando el tipo de tejido y otras facetas), el hábito y la vestimenta no ha cambiado. Debido a que el color de la capa y del manto de la virgen son similares, desde los orígenes primitivos de la Hermandad, un destacamento de la Guardia Civil de Cantabria escolta al paso de la Virgen con uniforme de gala ytricornio. Con el paso del tiempo, este hecho se convirtió en una tradición arraigada en la Cofradía,, y por ello, en marzo de 2008 se nombró hermano mayor honorífico de la Hermandad a la 13ª Zona de la Guardia Civil en Cantabria. Estos hermanamientos con instituciones y autoridades públicas son tradicionales en la Semana Santa de Santander. De esta manera, a la Cofradía de Los Dolores la acompaña la escolta de gala de la escuela general de la academia del Cuerpo Nacional de Policía de Ávila, de prácticas en la comisaría de Santander. Además, la Hermandad del Santo Entierro es acompañada por la escolta de gala de la Policía Municipal de Santander, y también la Cofradía de la Paloma es escoltada desde antaño por la escolta de gala de los bomberos voluntarios de la ciudad. Cabe destacar ahora, que las vestimentas de San Juan, se han alternado durante los años, poseyendo este multitud de ropas confeccionadas especialmente para cada situación. En el año 2011, un Cofrade de la Hermandad se ofreció a realizar nuevas andas para la talla titular, (La Virgen de la Esperanza), las cuales se caracterizaban por ostentar bandas laterales, frontales y traseras de madera, ricamente decoradas por ornamentos decorativos tales como filigranas y motivos florales de plata y metales nobles, los cuales conformaban un precioso trono el cual era portado a hombros por 24 costaleros, idea cuyo cometido era ofrecer una nueva imagen de mayor solemnidad y elegancia al conjunto, el cual estaba rodeado por preciosos faldones del mismo color verde que el manto. Este cambio de trono influyó también en la disposición y transporte de las imágenes, puesto que durante esa Semana Santa el “San Juan”, fue portado a ruedas en el anterior trono de plata de la Virgen, y la Virgen pasó a portarse a hombros en el nuevo trono, con nueva candelería y decoración. Pero este cambio no supuso una buena opinión entre la mayor parte de la Cofradía, y debido además a una pérdida de costaleros y nazarenos, se decidió no volver a portar dicho trono, el cual quedó almacenado en un local de la ciudad. Al año siguiente, y por decisión popular, se volvió a utilizar el mismo trono de plata a ruedas para la Virgen, y las mismas andas para San Juan. A continuación nos disponemos a hablar de las procesiones y actos de la Hermandad. Oficialmente, la Hermandad procesiona los días de Domingo de Ramos, Lunes, Jueves, Viernes y Sábado Santo, y por último Domingo de Resurrección. Cabe destacar que la penitencial organiza individualmente dos cortejos procesionales; El del Lunes y el del Sábado Santo. En este último, y como ya hemos dicho, la hermandad recorre las principales arterias del centro urbano de Santander, (tales como Calvo Sotelo, Juan de Herrera, Amós de Escalante…), hasta finalizar en el propio templo de San Francisco con el Sermón de la Soledad. En esta procesión de La Soledad resalta la abultada y casi exclusiva participación femenina, y el horario de madrugada, (pues la procesión comienza a las 7:00h. El día de Lunes Santo, es también uno de los días más significativos e importantes para la Cofradía de la Esperanza, pues es en esa procesión cuando los cofrades acompañan a su Virgen titular hasta el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en una procesión en la que la imagen es portada en el marco de una antigua y bonita procesión que hace llegar a los enfermos la Virgen de la Esperanza. Allí se realiza un acto de oración, y posteriormente la hermandad regresa a su sede.