Lorenzo El Pulguita, personaje muy popular en el Santander de después de la guerra, que tocando hábilmente las tejoletas (dos tablas que a modo de castañuelas se hacen sonar entre los dedos) se presentaba siempre cantando:
“Dicen que Pulga se ha muerto,
eso si que no es verdad,
si Pulga se hubiera muerto
no estaría en éste lugar”.