Cuadro del puerto de Santander de Mariano Ramón Sánchez encargado por el rey Carlos IV hacía 1793, dentro de una serie dedicada a los puertos más importantes de España de la época. En él se aprecia el muelle santanderino desde “la dársena chica”. Se ven pequeñas naves mercantes frente a las casas del primer ensanche de Santander (actual paseo de Pereda) y en la dársena exterior (o Muelle de Naos) donde solo sean visibles sus mástiles.
Y entrando en el muelle un buque de guerra (navío de línea o fragata) en el cual ondea la bandera rojigualda.