Durante el siglo XVIII, en Santander y su Abadía la actividad de la Inquisición experimentó un crecimiento muy intenso.La necesidad de este aumento de actividad se justificaba en 1763 por “los muchos negocios que pueden ocurrir con la ocasión del nuevo obispado, el mucho comercio, concurrencia de extranjeros y naciones y ser lugar de mucha población”.Pronto, las comisarías o varas de alguacil en Santander suscitaron el interés de numerosos candidatos que pugnaron por conseguirlas.
Fuente: Inquisición, regalismo y reformismo borbónico: el Tribunal de la Inquisición … Escrito por Marina Torres Arce
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