Así lo relatan los Diarios de Valencia y Málaga durante el verano de 1808:
“El ilustrísimo Sr. Obispo al frente de 14.000 hombres marcha a atacar a los franceses que están en Burgos, habiendo invertido todos sus bienes propios y todas sus rentas en dicho Exército. ¡Qué honrosa intrepidez! ¡Qué desinterés tan noble! ¡Qué cristiana generosidad! En ceder sus rentas no ha hecho más
que cumplir con su deber. En dar todos sus bienes se advierte un gran patriotismo. Pero en colocarse al frente de 14.000 guerreros denota un alma muy elevada, es un héroe”