Ejercieron este oficio de fundidor de campanas, que todavía perdura, en la Merindad de Trasmiera, sobre todo en Meruelo y Arnuero También dejaban su tierra estos artesanos en marzo y regresaban con el invierno.
Trabajaban a pie de obra y comenzaban por construir el horno quealimentaban con leña y, en época moderna, con gasoil. Iban por todaEspaña y uno de estos maestros, Alejandro Gargollo, de Arnuero, fundió hacia 1706 la campana grande de la catedral de Toledo, que es la mayor de España.