En la bajada este de nuestra Catedral, nos encontramos con dos leones que sujetan entre sus garras sendos escudos.
El que ahora nos ocupa, sujeta las armas del apellido Rasines. Corresponde este escudo al apellido de uno de los dos arquitectos que proyectaron y dirigieron la reconstrucción de la Catedral tras el incendio de Santander en el año 1941.
En un próximo post nos ocuparemos del otro escudo.
More Stories
El patrimonio intangible de las calles de Santander
1921:Señoritas santanderinas prendiendo medallas y escapularios en el pecho de los veteranos del Batallón de Valencia
1971:en tal día como hoy una flotilla alemana visita nuestro puerto