Los domingos durante la pesquería de los besugos y la cuaresma los maestres y oficiales mandaban decir una misa
en San Francisco en el altar del Señor Santiago, y a ella debían asistir todos los cofrades; terminada la misa pasaban a tratar de los negocios de la pesquería.
Concordias y pleitos, privilegios y ordenanzas, acuerdos y desavenencias en la pesquería de la sardina o del besugo
o en el empleo de redes y pinazas, eran los temas que cada domingo trataban y discutían los honrados navegantes de las cofradías de San Martín de la Mar y de los Gloriosos Mártires