Las señoras tenían su reunión en sus casas, tomaban chocolate elaborado en los conventos y hecho por las monjas a toda confianza, y luego se iban a rezar el rosario y a oir el sermón a la Catedral, a San Francisco, al convento del Prado de Viñas otras optaban por la iglesia de los padres jesuítas; en ésta cada padre tenía un confesonario con su nombre para que pudieran elegir.
More Stories
Carreta de bueyes en la calle Menéndez Pelayo
1923: S.M. el Rey don Alfonso XIII y Antonio Maura en la inauguración de la Biblioteca Menéndez Pelayo
1907:Plaza de Pi Margall presidida por el ayuntamiento y el convento de San Francisco